Espero que os guste mucho, es una receta que requiere un poco de tiempo, unas 2-3 horas pero muy agradecida y con un sabor muy distinto a lo que estamos acostumbrados.
Ingredientes (4 pax):
-1 paletilla de cordero (si puede ser deshuesada mejor, a no ser que tengáis mucha maña)
-2 cebollas medianas-50 g de almendra (a poder ser peladas)
-1 rama de canela
-1 cucharada de mantequilla
-10 ciruelas pasas
-10 'orejones'
-2 cucharadas de ras-el hanout
-2 cucharadas de miel
-Aceite de oliva
-Sal y Pimienta
Elaboración:
-Poner un poco de aceite y mantequilla en una sartén. Añadir el cordero ya troceado, salpimentar y dorar. Una vez ya haya cogido color, reservar. En ese mismo aceite pocharemos la cebolla.
-Cuando ya esté bien pochada, añadir el ras-el hanout, las ciruelas, las almendras*, los orejones, la canela y la miel. Saltear durante 1-2 minutos y añadir el cordero de nuevo.
*Si las almendras no están peladas, las pieles irán saltando a medida que se va cociendo. Lo mejor es saltearlas un poco antes y pelarlas.
-Cubrir con agua y dejar a fuego lento durante 1.5-2 horas (dependiendo del tamaño de los trozos del cordero). Lo mejor es ir comprobando si el cordero va quedando tierno.
-Finalmente el agua quedará consumida aunque es mejor que quede con un poco de caldo.
*Como veis en la foto, yo lo acompañé con un poco de cous-cous; si lo tomáis solo el sabor quizá es demasiado dulce para lo que estamos acostumbrados, pero con el cous-cous queda solucionado.
Instrucciones para el cous-cous
Las medidas son 100gr de cous-cous para cada 150ml de agua. Poner a hervir el agua con un poco de sal y aceite. En cuanto rompa a hervir añadir el cous-cous, tapamos y apagamos el fuego. Esperar 10 minutos y al abrir veréis como ha absorbido todo el agua y queda suelto.
Qué aproveche!
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